Daniel Banda

Daniel Banda es originario de Ciudad Juárez, Chihuahua, México. Tuvo la oportunidad de trabajar con las Naciones Unidas en la Organización Internacional para las Migraciones durante 2 años, lo que supuso su introducción al ámbito humanitario. Sus experiencias en el espacio humanitario han sido significativas para él, ya que le han permitido aprender sobre las complejas vidas de las personas en movimiento, y cómo sus viajes pueden ser dignos. Daniel comparte: "Espero seguir aportando mi granito de arena, y así humanizar a las personas en movimiento que viven, o están de paso, en esta ciudad".

Vivir en la frontera y ser testigo de la dinámica fronteriza entre los dos países la mayor parte de su vida, ayuda a Daniel a entender que los migrantes sueñan con encontrar una mejor calidad de vida para ellos y para sus familias. Conectar con los huéspedes del albergue es gratificante para él: a través de la paz y la compasión, Daniel prefiere trabajar poco a poco para cambiar la injusta narrativa contra los migrantes. 

Algunos de los objetivos de Daniel en Abara son la formación de voluntarios, clases de inglés y un laboratorio informático. Cuando los voluntarios del refugio están equipados, pueden crecer personal y profesionalmente. Daniel disfruta conectando dos ciudades, dos países y muchas vidas individuales. 

En su tiempo libre, Daniel disfruta apoyando diferentes proyectos alrededor de Ciudad Juárez junto con su esposa. A través de su iglesia, Daniel y Caro apoyan a personas con adicción a sustancias, niños hospitalizados y, algún día cercano, a mujeres en prisión. Daniel toca la guitarra, canta y dirige el culto, e incluso enseña música a otros. "Afortunadamente, gracias al servicio que presto en Abara y en mi iglesia, puedo mostrar a mis hijos el amor de Dios y el servicio a mi comunidad", dice.